jueves, 8 de septiembre de 2016

Siempre, otra vez

Siempre que alguien quiere entrar a mi vida de forma especial, o importante, como queráis decirlo, les advierto de que no soy fácil, que no dejo entrar en mi vida a cualquiera que pueda dejarla patas arriba. Me cuesta mucho confiar en la gente y mostrar mi cariño hacia ellos, y no porque no sea confiada, ¡qué va!, pero con los años, he aprendido que se puede confiar en pocas personas, y con tiempo.
¿Y sabéis? Me dicen que no les importa, que van a conseguir que vuelva a confiar en alguien, que van a lograr hacerme ver el mundo con otra perspectiva, que aguantarán mis manías para que yo pueda aguantar las suyas, que se harán un hueco en mi vida y yo en la suya, que me van a demostrar que de verdad quieren formar parte de mi rutina ¿Y qué que les digo yo? Yo solo me rio, les reto a intentarlo mientras empiezo a contar los días que quedan para que se rindan.
No les culpo realmente, quizá sea demasiado dura, quizá pida demasiado

No hay comentarios:

Publicar un comentario